La Casa de los Caramelos, con más de seis décadas de historia, es mucho más que una simple tienda de dulces. Fundada en 1953, esta empresa familiar se ha convertido en un verdadero emblema de Valencia. Actualmente ubicada en Gran Vía Ramón y Cajal 34, la tienda sigue siendo un referente en la venta de caramelos y regalos, manteniendo la tradición y adaptándose a los nuevos tiempos.
De la Frutería Paquita a un ícono valenciano
La historia de la Casa de los Caramelos comienza en el año 1953 cuando Vicente García Tamarit decidió transformar la Frutería Paquita, ubicada en la calle Muro de Santa Ana, en un espacio dedicado a los caramelos y los regalos. Lo que empezó como una tienda pequeña, poco a poco fue creciendo hasta ocupar casi toda la calle, gracias a la demanda y popularidad que alcanzó entre los valencianos.
En 1969, su hijo, Vicente García López, se unió al negocio, y juntos llevaron la empresa a otro nivel, inaugurando dos nuevos establecimientos en la calle Játiva, consolidando así la expansión de la marca. Esta unión entre padre e hijo convirtió la Casa de los Caramelos en un referente absoluto, no solo en Valencia, sino también a nivel regional, por ser una tienda con una enorme variedad de caramelos por metro cuadrado.
Con cada fiesta de cumpleaños, comunión o evento infantil, los caramelos y regalos de esta tienda han acompañado a generaciones de valencianos, convirtiéndose en parte esencial de los momentos más dulces de la ciudad.
Tercera generación al frente: tradición y modernización
En 2014, con la incorporación de María Jesús Pérez Álvaro y María Jesús García Pérez, mujer e hija de Vicente García, la empresa dio un nuevo paso hacia el futuro, sin olvidar la tradición que la ha caracterizado durante décadas. Tras el fallecimiento de Vicente García en 2015, ellas asumieron la dirección de la tienda, y desde entonces, han mantenido el legado familiar, apostando por la innovación y la calidad.
En 2021, la Casa de los Caramelos cambió su ubicación al local actual en Gran Vía Ramón y Cajal 34, desde donde sigue ofreciendo los mismos productos y servicios de siempre, pero con una visión adaptada a los nuevos tiempos. La tienda no solo sigue siendo un punto de referencia en la ciudad, sino que ha ampliado su alcance al ofrecer envíos a domicilio y compras a través de su página web, facilitando así el acceso a sus productos para todos sus clientes.
El compromiso de la nueva generación es continuar brindando un servicio de calidad, y ofrecer opciones como los caramelos sin azúcar, elaborados con stevia u otros edulcorantes naturales, adaptándose a las tendencias actuales de consumo saludable y consciente.
Una tienda emblemática reconocida por su historia
En 2022, la Casa de los Caramelos recibió un reconocimiento muy especial al ser nombrada Establecimiento Emblemático de Valencia por la Asociación de Comercios del Centro de Valencia. Este galardón no solo reconoce los más de 60 años de historia de la tienda, sino también su impacto en la vida de la ciudad, habiendo sido testigo de miles de momentos de felicidad, desde los cumpleaños hasta las comuniones y otras celebraciones infantiles.
Con 862.920 clientes satisfechos y 916.742 momentos de felicidad registrados a lo largo de su historia, la Casa de los Caramelos es, sin duda, una parte fundamental de la cultura valenciana, un espacio que ha sabido adaptarse a las nuevas generaciones manteniendo siempre la esencia de la tradición.
Innovación sin perder el sabor de la tradición
Uno de los retos más importantes que enfrenta la actual dirección es la adaptación a las necesidades alimentarias modernas. Cada vez más personas son conscientes de sus intolerancias alimentarias, y la Casa de los Caramelos ha sabido responder a esta demanda al ofrecer bolsitas de chuches específicas para aquellos que tienen alergias o restricciones alimentarias. El objetivo es claro: nadie debería quedarse sin disfrutar de la experiencia dulce que ofrece la tienda, independientemente de sus necesidades dietéticas.
Además, la tienda se distingue por su atención al cliente. Si un cliente busca un tipo de caramelo que no está en el inventario, el equipo hará todo lo posible por conseguirlo. Este enfoque cercano y personalizado es una de las claves que ha permitido a la Casa de los Caramelos mantenerse a flote y destacar en un sector tan competitivo.
La tradición que continúa: la tercera generación
La tercera generación de la familia, liderada por María Jesús Pérez Álvaro y María Jesús García Pérez, sigue adelante con el compromiso de mantener el legado familiar. Ambas, profundamente arraigadas en la historia de la tienda, ven en la Casa de los Caramelos más que un simple trabajo: es una forma de vida y una tradición que pasa de generación en generación.
La tienda no es solo un lugar donde se venden caramelos; es una parte de la cultura local, un espacio en el que las personas no solo compran, sino que también reviven momentos especiales de su infancia. Su misión es clara: continuar ofreciendo la mayor variedad de productos de calidad, adaptándose a los nuevos tiempos sin perder la esencia de la tradición familiar.
Un futuro lleno de dulces momentos
Con 69 años de historia, la Casa de los Caramelos sigue siendo un pilar en la vida de miles de valencianos, y su futuro sigue tan brillante como siempre. A través de la innovación y la fidelidad a sus raíces, la tienda se ha ganado un lugar especial en los corazones de quienes la visitan.
El reconocimiento como Establecimiento Emblemático es un testimonio del impacto que ha tenido esta pequeña empresa familiar en la comunidad. Con la tercera generación al mando, la Casa de los Caramelos está más comprometida que nunca con seguir siendo una referencia en la vida cotidiana de Valencia, continuando con su misión de endulzar la vida de sus clientes, y asegurando que la próxima generación de valencianos también pueda disfrutar de su increíble oferta de dulces y regalos.
Conclusión: La Casa de los Caramelos ha sido parte de la historia de Valencia durante casi siete décadas, adaptándose a los cambios del tiempo sin perder su esencia. ¿Cuál es tu recuerdo más dulce de la Casa de los Caramelos? ¿Qué crees que hace que este tipo de negocios familiares sigan siendo tan importantes para la vida en la ciudad?