La Universitat Politècnica de València (UPV) ha comprado la histórica Casa de los Caramelos, ubicada junto a las Torres de Serranos, por más de 3 millones de euros. Este icónico espacio, cerrado durante años, será transformado en un centro académico y cultural, destinado a la investigación, docencia y eventos representativos.
La Casa de los Caramelos: Un legado que se transforma
La Casa de los Caramelos ha sido durante décadas un referente en el comercio valenciano. Este pequeño negocio, conocido por generaciones de valencianos, fue más que una simple tienda: se convirtió en parte del tejido urbano y cultural de la ciudad. Sin embargo, con su cierre, el edificio, ubicado en el número 7 de la calle Conde Trénor y el número 6 de la calle Muro de Santa Ana, quedó en desuso, hasta que la Universitat Politècnica de València (UPV) vio su potencial y decidió transformarlo en un espacio para la investigación y la cultura.
La compra, por un valor de 3,1 millones de euros, no solo asegura la reutilización de este inmueble, sino que también refuerza la política de la Generalitat Valenciana de optimizar sus activos mediante la venta de propiedades en desuso. Para la UPV, esta adquisición es una apuesta estratégica que permitirá ampliar sus actividades docentes e investigadoras, pero también servirá para consolidar su presencia en el centro histórico de Valencia, un espacio de gran valor patrimonial y cultural.
Un espacio académico con vocación cultural
La antigua Casa de los Caramelos se convertirá en un centro multifuncional dedicado a la docencia, la investigación y la transferencia de conocimiento, áreas clave para una universidad que busca seguir creciendo y consolidarse como referente internacional. Además, este espacio no se limitará a las actividades puramente académicas, sino que también será el escenario de eventos culturales e institucionales que permitirán una mayor interacción entre la universidad y la ciudad.
La ubicación del edificio, en pleno centro histórico de Valencia y cerca de monumentos tan emblemáticos como las Torres de Serranos, le otorga una visibilidad especial, lo que lo convierte en un lugar ideal para albergar eventos representativos de la universidad. La UPV planea utilizar este espacio no solo para exposiciones y conferencias, sino también para actividades que fomenten el diálogo cultural y el encuentro académico en un ambiente accesible tanto para la comunidad universitaria como para los ciudadanos.
La estrategia de crecimiento de la UPV
La adquisición de la Casa de los Caramelos forma parte de una estrategia más amplia de la UPV para expandir sus instalaciones y optimizar sus recursos. En los últimos años, la universidad ha experimentado un crecimiento constante, tanto en número de estudiantes como en su oferta académica. En este contexto, la necesidad de nuevos espacios es evidente, y este nuevo centro contribuirá a satisfacer esas demandas, asegurando que la UPV pueda seguir ofreciendo instalaciones de vanguardia para la formación y la investigación.
La decisión de la universidad de invertir en un edificio histórico no es casual. A través de este proyecto, la UPV demuestra su compromiso con la ciudad de Valencia, no solo como motor académico y científico, sino también como un actor clave en la preservación y revitalización del patrimonio cultural de la ciudad. Al convertir un espacio emblemático en un centro de conocimiento, la universidad reafirma su papel en el desarrollo cultural y social de Valencia.
Un ejemplo de eficiencia en la gestión del patrimonio público
Por otro lado, la venta del inmueble también refleja la eficiencia con la que la Generalitat Valenciana está gestionando su patrimonio. La Casa de los Caramelos, al igual que otros inmuebles, formaba parte de los activos de la Generalitat que se habían quedado sin uso. A través de su venta directa a la UPV, la Generalitat no solo reduce el coste de mantenimiento de propiedades que ya no están en funcionamiento, sino que también genera ingresos para las arcas públicas.
Con esta operación, la Generalitat avanza en su plan de captar más de 74,9 millones de euros en 2024 mediante la venta de inversiones reales, una medida que permite inyectar fondos a la Administración y utilizar los recursos de manera más eficiente. La Casa de los Caramelos es un claro ejemplo de cómo un inmueble histórico puede ser reutilizado para fines académicos y culturales, convirtiéndose en un activo para la comunidad.
El impacto en la comunidad universitaria y valenciana
La compra de la Casa de los Caramelos no solo beneficiará a la UPV y su comunidad académica, sino que también tendrá un impacto positivo en la ciudad de Valencia. Al situarse en una de las zonas más transitadas y turísticas de la ciudad, la presencia de la universidad en este lugar contribuirá a fortalecer la conexión entre la academia y la sociedad.
El nuevo centro no solo será un espacio para la investigación, sino también para el diálogo cultural. Se prevé que la Casa de los Caramelos acoja exposiciones, seminarios, talleres y otros eventos abiertos al público que atraerán tanto a estudiantes como a ciudadanos interesados en la ciencia, el arte y la cultura. Esta interacción con la ciudad ayudará a revitalizar el centro histórico, dándole un nuevo uso a un espacio que había quedado en el olvido tras el cierre del famoso comercio.
¿Qué podemos esperar del futuro del inmueble?
La rehabilitación de la Casa de los Caramelos será un proyecto emocionante, no solo por su valor histórico, sino por el potencial que tiene para convertirse en un referente académico y cultural en la ciudad de Valencia. Se espera que las obras de remodelación y adecuación del edificio comiencen en los próximos meses, con el objetivo de que el nuevo centro esté operativo en el corto plazo.
Los planes de la UPV para este inmueble incluyen la creación de salas de investigación, aulas y espacios expositivos. Además, se busca mantener elementos históricos y arquitectónicos del edificio, para que la nueva sede combine la modernidad de un espacio académico con el legado histórico de uno de los locales más recordados por los valencianos.
Un modelo de reutilización del patrimonio urbano
La transformación de la Casa de los Caramelos en un espacio universitario es un ejemplo de cómo las ciudades pueden reutilizar sus edificios históricos para nuevos fines. Este proyecto pone de relieve la importancia de preservar el patrimonio, al tiempo que se dota de nuevos usos a inmuebles que han quedado en desuso.
Al adquirir este edificio, la UPV no solo asegura la expansión de sus actividades, sino que también participa en la revitalización del centro histórico de Valencia, integrando un espacio de conocimiento en un entorno cargado de historia. Este enfoque podría servir de ejemplo para otras instituciones que buscan ampliar sus instalaciones sin recurrir a la construcción de nuevas infraestructuras, promoviendo la sostenibilidad urbana y la conservación del patrimonio cultural.
Reflexión final: La compra de la Casa de los Caramelos por parte de la UPV supone un nuevo hito en la relación entre la universidad y la ciudad de Valencia. ¿Cómo crees que este proyecto afectará a la vida cultural y académica de la ciudad? ¿Qué otros edificios históricos crees que podrían ser reutilizados para fines educativos o culturales en Valencia?