📍 Iàtova (Foia de Bunyol), abril de 2025

Las excavaciones realizadas en el yacimiento ibérico del Pico de los Ajos, situado en el término municipal de Iàtova, han revelado un dato crucial para la arqueología valenciana: el hallazgo de quince monedas con más de dos mil años de antigüedad que confirman la existencia de rutas comerciales activas a través del corredor del río Magre en época ibérica.

Este descubrimiento forma parte de un proyecto de investigación liderado por la Universitat de València y ha sido publicado recientemente en la Revista Numismática Hécate, lo que consolida el valor científico del hallazgo y reafirma el papel estratégico del enclave en las redes económicas de la Antigüedad.

Un conjunto numismático excepcional

El conjunto de monedas recuperado durante las ocho campañas de excavación entre 2017 y 2024 es uno de los más significativos de los siglos II y I a.C. en tierras valencianas, según explica David Quixal, profesor del Departamento de Prehistoria, Arqueología e Historia Antigua de la UV y codirector de la excavación junto a la profesora Consuelo Mata.

Más de la mitad de las piezas proceden de cecas ibéricas del actual territorio valenciano, como:

• Arse–Saguntum (Sagunto)
• Saiti (Xàtiva)
• Kelin (Caudete de las Fuentes)
• Kili, de ubicación todavía discutida.

Además, se han localizado monedas acuñadas en Roma y en otras regiones de la península, lo que indica contactos comerciales más amplios. El hallazgo se refuerza con la documentación de 25 monedas más, descubiertas de forma fortuita o procedentes de actividades de expolio que afectaron al yacimiento durante décadas.

El río Magre: una autopista fluvial en tiempos ibéricos

Las evidencias numismáticas, junto a otros elementos como los plomos con inscripciones en escritura ibérica hallados en el mismo enclave, apuntan a que el río Magre desempeñó un papel clave como vía de comunicación y transporte entre los asentamientos del interior y el litoral valenciano.

“El Pico de los Ajos se revela como un centro estratégico en una red económica pre-romana más extensa de lo que creíamos, gracias a su posición elevada y cercana a un eje fluvial clave”, subraya el equipo investigador.

De la investigación a la divulgación

Las campañas arqueológicas no solo han permitido estudiar y contextualizar los hallazgos, sino que también han contribuido a la puesta en valor del yacimiento como Bien de Interés Cultural (BIC). El Pico de los Ajos forma parte actualmente de la Ruta dels Ibers de València, que agrupa los principales yacimientos ibéricos visitables de la provincia.

En paralelo, el proyecto cumple una función educativa: alumnos del grado de Historia y del máster de Arqueología de la UV realizan sus prácticas en este enclave, participando activamente en las excavaciones.

Jornadas de puertas abiertas: el pasado, al alcance de todos

A finales de este mes se celebrará una nueva edición de Territori Iber, unas jornadas de puertas abiertas que invitan a la ciudadanía a conocer in situ el yacimiento y su historia. A través de visitas guiadas y actividades didácticas, se busca acercar el patrimonio arqueológico a la sociedad y dar a conocer el valor de la cultura ibérica en las comarcas interiores de València.

Conclusión: monedas que abren rutas de conocimiento

El hallazgo de monedas en el Pico de los Ajos no solo proporciona evidencia tangible del comercio ibérico, sino que permite reinterpretar el papel de las vías fluviales como ejes de conexión y desarrollo. Lejos de ser un enclave aislado, Iàtova fue un nodo dinámico dentro de una red comercial protohistórica, en la que el río Magre fue testigo y protagonista.

Más de dos mil años después, sus aguas siguen trayendo noticias de un pasado que no deja de sorprender.