David Bisbal inaugura la Navidad en el Roig Arena con un concierto multitudinario
7 de diciembre de 2025 | Redacción

David Bisbal inauguró este fin de semana la Navidad en Valencia con un concierto multitudinario en el Roig Arena dentro de su gira “Todo es posible en Navidad”. Más de 12.000 personas, desde niños hasta seguidores veteranos, llenaron el recinto para vivir un espectáculo que mezcló villancicos, grandes éxitos de su carrera y varios guiños muy especiales al público valenciano.
A punto de cumplir 25 años sobre los escenarios, el artista almeriense se dio el gusto de compartir su afición por la música navideña con sus seguidores. Desde la publicación del álbum “Todo es posible en Navidad” en 2024, Bisbal se ha consolidado como una de las voces de referencia de estas fechas, y en esta gira confirma que el formato navideño encaja perfectamente con su energía, su registro vocal y su forma intensa de entender el directo.
Un arranque lleno de emoción y espíritu navideño
El recital arrancó con “Navidad junto a ti”, la emotiva balada de Marco Antonio Solís que se ha convertido en uno de los clásicos más reconocibles de la Navidad en América Latina. Desde los primeros acordes, el Roig Arena se transformó en una gran sala de estar compartida, iluminada por miles de luces de teléfonos móviles y con un ambiente de fiesta familiar.
Sin apenas pausa, llegó “Todo es posible en Navidad”, tema que da título al disco y a la gira. El público se levantó de sus asientos desde los primeros compases y coreó el estribillo como un himno, marcando el tono de una noche pensada para celebrar, cantar y dejarse llevar por la emoción.




La Senyera al cuello y un guiño directo a Valencia
Uno de los momentos más celebrados de la noche se produjo cuando Bisbal apareció en el escenario luciendo la Senyera al cuello. El simple gesto provocó una ovación cerrada del público, que respondió con gritos, aplausos y banderas alzadas en las gradas.
El artista aprovechó para dedicar unas palabras a la tradición musical de la ciudad y de la Comunitat, subrayando que es “una gran responsabilidad venir a cantar a una tierra donde la música se lleva dentro del corazón”. El mensaje, dirigido a músicos, bandas, coros y cantantes valencianos, se convirtió en una de las intervenciones más aplaudidas del concierto.
Homenaje a Nino Bravo y a quienes ya no están
El bloque más emotivo llegó con un homenaje explícito a las personas queridas que ya no están. Primero, con el villancico “Navidad, dulce ilusión”, y después con un cuidado arreglo de “Al partir, un beso y una flor”, el clásico eterno de Nino Bravo, íntimamente ligado a la memoria colectiva valenciana.
Bisbal explicó que dedicaba la canción “a aquellas personas que ya no están entre nosotros”, y el Roig Arena se sumió en un silencio respetuoso, solo roto por los aplausos al final del tema. Fue uno de los momentos más intensos de la velada, con muchos asistentes visiblemente emocionados.
El tributo continuó con “Siempre te recordaré”, su versión en español del clásico “Always On My Mind”. El cantante recordó que la pieza está pensada precisamente para honrar la memoria de quienes se han marchado y aprovechó para reivindicar “la forma en la que se grababan las canciones hace 40 o 50 años”, dando valor a la interpretación, la melodía y la emoción por encima de la tecnología.
Un repaso a sus grandes éxitos y máxima complicidad con el público
Tras el bloque más íntimo, el concierto viró hacia el repertorio más reconocible de Bisbal. Enlazando un tema tras otro, el artista repasó algunas de las canciones que han marcado su trayectoria desde sus inicios.
Sonaron “No amanece”, “Esclavos de tus besos”, “Dígale”, “Quién me iba a decir” o “Silencio”, coreadas de principio a fin por un público totalmente entregado. El Roig Arena se convirtió en un gran coro, con los asistentes cantando a pleno pulmón, grabando vídeos, bailando en los pasillos y convirtiendo la noche en una celebración colectiva.
No faltaron tampoco los himnos que lo lanzaron a la fama. Clásicos como “Corazón latino”, “Lloraré las penas” y “Bulería” desataron la euforia en el tramo final del bloque pop, con Bisbal recorriendo cada esquina del escenario, saludando a las primeras filas y agradeciendo en varias ocasiones el cariño que ha recibido siempre en Valencia.
En uno de sus mensajes finales, el cantante reconoció que se marchaba “con el corazón contento y la voz plena” y manifestó su deseo de volver pronto al Roig Arena, “a esta tierra donde se respira música y donde hay grandes músicos y cantantes”.
Villancicos, guitarra española y un final de concierto muy festivo
El epílogo del espectáculo tuvo sabor a villancico clásico. En “Los peces en el río”, el público disfrutó de un potente solo de guitarra española a cargo del músico Sergio, que fue recibido con una gran ovación por parte del auditorio.
El ambiente festivo se mantuvo con “Mi burrito sabanero”, convertida en una pequeña cabalgata musical dentro del pabellón, con familias enteras cantando y bailando al ritmo del popular villancico y niños subidos a los hombros de sus padres para no perder detalle.
El gran cierre llegó con una versión vibrante de “Ave María”, uno de los mayores éxitos de David Bisbal. El tema desató la euforia colectiva y puso el broche definitivo a casi dos horas de música, recuerdos, guiños a Valencia y mucho espíritu navideño.
Una noche redonda para arrancar la Navidad en Valencia
Con “Todo es posible en Navidad”, David Bisbal no se limitó a ofrecer un concierto temático, sino que construyó una experiencia completa: mezcla de tradición y modernidad, de villancicos y grandes hits, de homenajes a quienes ya no están y celebración del presente.
El Roig Arena vibró con cada estribillo y cada recuerdo, en una noche que muchos asistentes guardarán como el inicio perfecto de la Navidad 2025 en Valencia, y como la confirmación de que el formato navideño encaja como un guante en el universo musical de Bisbal.
Etiquetas: