Desmantelan 12 plantaciones de marihuana en Ribera Alta

Golpe al narcotráfico en la comarca valenciana

Las fuerzas de seguridad han asestado un duro golpe al narcotráfico con el desmantelamiento de doce plantaciones de marihuana en la comarca de la Ribera Alta. Esta importante operación ha permitido detener a varios individuos y acabar con una red de cultivo intensivo de cannabis instalada en diversas localidades de la provincia de Valencia.

La Guardia Civil, en colaboración con la Policía Nacional y las autoridades judiciales, ha intervenido en varias viviendas y naves agrícolas donde se cultivaba marihuana de forma intensiva, utilizando tecnología avanzada para mejorar el rendimiento y evadir la detección.

Una operación coordinada de gran escala

La investigación comenzó hace varios meses a raíz de sospechas en torno al aumento del consumo energético en determinadas zonas rurales de la Ribera Alta, lo que llevó a los investigadores a pensar en una posible actividad ilícita relacionada con el cultivo de marihuana bajo techo (indoor).

Entre las localidades afectadas por estas actuaciones policiales destacan:

• Alzira
• Carcaixent
• Algemesí
• Guadassuar
• Alberic
• L’Alcúdia

En total, se han intervenido más de 6.000 plantas de cannabis, con un peso estimado de más de 500 kilogramos. También se han requisado materiales de cultivo valorados en cientos de miles de euros.

Equipamiento sofisticado para maximizar la producción

Las plantaciones estaban cuidadosamente diseñadas con sistemas profesionales de:

• Iluminación LED y halógena de alta intensidad
• Ventilación y extracción de humos
• Control automático de temperatura y humedad
• Riego por goteo programado

Gracias a esta infraestructura, los implicados eran capaces de generar varias cosechas al año, con una calidad muy superior a la media ofrecida en el mercado ilegal.

Vínculos con el crimen organizado

Según fuentes de la investigación, tras estas plantaciones ilegales de marihuana se encontraba una red bien organizada, presuntamente vinculada con el crimen organizado internacional. Los detenidos son de nacionalidades diversas, incluidos ciudadanos españoles, marroquíes y del este de Europa.

Las labores de vigilancia y control han revelado cómo la droga se transportaba hacia otras regiones de España e incluso fuera del país, ocultándola en vehículos modificados para evitar los controles policiales.

Perjuicio para la red eléctrica y riesgos para la seguridad ciudadana

Uno de los aspectos más alarmantes de esta red de cultivo era su impacto sobre la infraestructura eléctrica urbana. Las plantaciones consumían altos niveles de electricidad debido al uso de múltiples dispositivos, y para evitar ser detectados, los criminales manipulaban las instalaciones eléctricas para obtener suministro de forma fraudulenta.

Esta práctica, además de suponer un grave delito contra el patrimonio, representaba un riesgo significativo de incendios y explosiones, afectando a la seguridad de las viviendas colindantes y del vecindario.

Resultados de la operación: detenidos y material incautado

Las autoridades han confirmado que la operación se ha saldado con:

• 18 detenidos, acusados de delitos contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico y pertenencia a organización criminal.
• Más de 6.000 plantas de marihuana incautadas en diferentes fases de crecimiento.
• Instalaciones de cultivo sofisticadas requisadas, incluyendo lámparas, ventiladores, fertilizantes, filtros de carbono y temporizadores digitales.
• Dinero en efectivo, varios vehículos y documentación relacionada con el transporte de la droga.

Plantaciones ‘indoor’: un modelo en auge para el cultivo ilegal

El fenómeno de las plantaciones de marihuana indoor ha crecido de forma alarmante en los últimos años en la Comunidad Valenciana. Estas instalaciones ocultas dentro de viviendas, naves o almacenes permiten mantener un control total sobre el ambiente, acelerando los ciclos de producción y aumentando la potencia psicoactiva del producto final.

Los cuerpos de seguridad han alertado sobre cómo este modelo pone en peligro la seguridad urbana. En muchas ocasiones, las instalaciones carecen de las garantías necesarias, originando sobrecargas eléctricas, incendios y contaminación ambiental.

Reacción vecinal: preocupación y alivio

Vecinos de las zonas intervenidas han expresado su alivio tras la operación, asegurando que desde hacía meses se percibían olores extraños y movimientos sospechosos en algunas viviendas. En algunos casos, habían observado cómo ciertos inmuebles permanecían con ventanas cerradas, luces encendidas 24 horas al día y visitas esporádicas en horas poco usuales.

Esta operación ha renovado el debate sobre:

• El control del alquiler de viviendas en zonas rurales
• Las responsabilidades de los propietarios al arrendar inmuebles
• La falta de regulación sobre infraestructuras agrarias en desuso

Colaboración ciudadana clave en la investigación

Un aspecto destacado por la Guardia Civil ha sido la colaboración de los ciudadanos. Varios avisos anónimos permitieron a los agentes establecer un patrón común en los inmuebles utilizados para el cultivo.

Gracias a estas aportaciones, se avanzó en tareas de vigilancia, seguimiento y obtención de pruebas que, finalmente, fueron clave en el desenlace exitoso de la operación.

El cultivo ilegal de cannabis: una amenaza creciente

España se ha convertido en uno de los principales países productores de marihuana ilegal en Europa. Las condiciones climáticas y la disponibilidad de infraestructuras abandonadas, especialmente en zonas rurales, favorecen la expansión de este fenómeno.

Este crecimiento llama la atención sobre la necesidad de:

• Refuerzo de las políticas de prevención y vigilancia territorial
• Mayor control sobre el alquiler de naves y viviendas en desuso
• Campañas de concienciación sobre los riesgos del narcotráfico

Auge de nuevas mafias especializadas

El avance tecnológico ha sido aprovechado por organizaciones delictivas tanto nacionales como extranjeras para diversificar sus operaciones. Hoy, muchas bandas han abandonado otros delitos para centrarse en el cultivo de marihuana, menos arriesgado judicialmente, pero altamente lucrativo.

La profesionalización del sector ilegal incluye la importación de semillas modificadas genéticamente, asesoramiento técnico especializado y redes de distribución bien estructuradas.

Perspectivas: reforzar la vigilancia y coordinación

Los expertos señalan que será necesario seguir reforzando la coordinación entre cuerpos de seguridad, administración y ciudadanía para combatir el cultivo ilegal de cannabis y sus consecuencias sociales.

Aunque esta operación representa un éxito sin precedentes en la Ribera Alta, también deja al descubierto la existencia de una estructura criminal más amplia que puede operar incluso a nivel europeo.

El papel de la tecnología en la lucha contra el narcotráfico

La Guardia Civil ha comenzado a aplicar herramientas tecnológicas punteras como:

• Análisis de consumo eléctrico en tiempo real
• Vigilancia mediante drones con cámaras térmicas
• Uso de software de reconocimiento de patrones de tráfico vehicular

Estas herramientas representan un paso más en el control del cultivo ilegal de marihuana y permitirán acortar los plazos de investigación.

Conclusión: un golpe estratégico que marca precedente

El desmantelamiento de estas 12 plantaciones en la Ribera Alta demuestra el compromiso de las autoridades con la erradicación del tráfico de estupefacientes y la seguridad ciudadana. La magnitud de la operación, el número de detenidos y la cantidad de marihuana incautada reflejan el gran nivel de recursos y sofisticación empleados por estas redes criminales.

Este tipo de actuaciones no solo buscan frenar el narcotráfico, sino también enviar un claro mensaje de que la producción y distribución ilegal de marihuana no quedará impune en la Comunitat Valenciana.

La colaboración ciudadana, junto con la implicación activa de las instituciones, será clave para prevenir la proliferación de nuevas plantaciones ilegales y garantizar la convivencia en las localidades afectadas.