Colombianos denuncian agresión policial en València ante la justicia

Un incidente que ha generado indignación y pone en el foco a las fuerzas de seguridad

Un grupo de ciudadanos colombianos residentes en València ha denunciado una presunta agresión policial ocurrida en la ciudad de València durante la madrugada del sábado 8 de junio. De acuerdo con los afectados, los agentes de la Policía Nacional habrían actuado de forma desproporcionada en una intervención en el barrio de la Malva-rosa, dejando a uno de los jóvenes hospitalizado tras un fuerte golpe en la cabeza.

El caso ha generado gran controversia por tratarse de un presunto abuso de autoridad, especialmente tratándose de un colectivo migrante. Las víctimas ya han interpuesto una querella judicial que podría derivar en una investigación penal contra los agentes implicados.

Lo ocurrido en la noche del sábado

El incidente tuvo lugar en la madrugada entre el viernes 7 y el sábado 8 de junio, cuando un grupo de jóvenes colombianos se encontraba celebrando una reunión en una vivienda privada en el barrio costero de la Malva-rosa, en el distrito marítimo de València.

Según relatan testigos presenciales, al lugar llegaron agentes de la Policía Nacional tras recibir una denuncia por ruido. Lo que comenzó como una intervención rutinaria, terminó en una presunta acción violenta por parte de los uniformados.

Versión de los denunciantes

Los afectados han compartido su versión de los hechos ante los medios y a través de sus redes sociales. Según relatan, uno de sus integrantes fue agredido sin previo aviso:

• Fue golpeado en la cabeza con una porra extensible, lo que le provocó una fuerte hemorragia.
• El joven tuvo que ser trasladado de urgencia al Hospital Clínic de València.
• Aseguran que no hubo resistencia ni provocación hacia los agentes.

Los vídeos difundidos por los propios vecinos muestran el rostro ensangrentado de la víctima e imágenes donde aparece inconsciente sobre el pavimento, rodeado por otros jóvenes visiblemente afectados por lo ocurrido.

El caso llega a los tribunales

Ante la gravedad de lo sucedido, los jóvenes colombianos han decidido presentar una querella formal ante el juzgado de València, con el apoyo de una abogada especializada en derechos humanos. En este documento acusan a los agentes de:

• Lesiones. El joven habría sufrido traumatismo craneoencefálico.
• Abuso de poder y actuación desproporcionada.
• Presuntas vulneraciones a los derechos civiles.

La letrada encargada del caso ha pedido al juzgado que se identifique a los agentes implicados y que se revisen las grabaciones de las cámaras corporales, si las hubiera, así como los partes policiales oficiales.

Investigación abierta

La Policía Nacional ha confirmado que se ha abierto un expediente para esclarecer los hechos. Aunque todavía no hay pronunciamiento oficial sobre posibles sanciones, fuentes internas señalan que se están revisando las actuaciones bajo protocolos estándar. La Subdelegación del Gobierno en València también ha sido informada del caso.

Ola de solidaridad y reacciones sociales

La denuncia no ha tardado en despertar una ola de solidaridad por parte de colectivos sociales, defensores de los derechos humanos y organizaciones de migrantes establecidos en la Comunitat Valenciana.

Varias asociaciones han emitido comunicados de apoyo a los afectados, reclamando que se investigue el presunto caso de violencia policial con tintes racistas. Algunas entidades han recordado que este tipo de incidentes dañan la imagen de las fuerzas del orden y aumentan la desconfianza entre la comunidad migrante.

Concentración en protesta

Vecinos del barrio y representantes de distintas ONG organizaron una concentración el domingo 9 de junio frente al edificio donde ocurrieron los hechos. Entre las consignas, se escucharon reclamos como «Basta de abuso policial» y «Justicia para nuestros jóvenes».

El joven herido sigue en recuperación

El joven colombiano agredido en el incidente permanece bajo observación médica y se encuentra convaleciente en su domicilio después de haber sido atendido con puntos de sutura y una larga evaluación neurológica. Los médicos han recomendado reposo absoluto y seguimiento clínico durante los próximos días.

La familia del joven ha denunciado públicamente la situación, pidiendo no solo justicia judicial, sino también que se tomen medidas institucionales para evitar que este tipo de hechos se repitan.

Un caso que pone de nuevo en entredicho el uso desproporcionado de la fuerza

Este nuevo caso ha reavivado el debate público sobre la legitimidad del uso de la fuerza por parte de los cuerpos policiales, especialmente respecto al trato que reciben las personas migrantes y racializadas.

Organizaciones defensoras de derechos civiles alertan sobre:

• Casos marcados por el perfilamiento racial.
• Falta de mecanismos eficaces para denunciar abusos.
• Escasa formación en derechos humanos por parte de algunos agentes.

Portugal, Francia y otros países de la Unión Europea ya han implementado mecanismos más eficaces de control policial, una referencia que desde hace años se propone adoptar en España.

Contexto: Derechos de los migrantes frente a la autoridad

Según la legislación española y los tratados internacionales ratificados por España, todas las personas, independientemente de su nacionalidad o situación administrativa, tienen derecho a un trato digno y a no ser objeto de discriminación o violencia.

Las fuerzas del orden tienen la obligación de actuar conforme al principio de proporcionalidad, necesidad y mínima intervención. En caso contrario, pueden enfrentarse a responsabilidades penales y civiles.

Documentación clave para el juicio

Los abogados que representan a las víctimas pretenden presentar como pruebas:

• Vídeos grabados por vecinos y testigos.
• Informes médicos del hospital Clínic.
• Testimonios presenciales de la agresión.

También se pedirá al juzgado que se examine si se han respetado los derechos procesales de los afectados durante la intervención policial.

Próximos pasos judiciales

El juzgado de instrucción número 6 de València será el encargado de estudiar la querella y decidir si se abre un proceso penal formal contra los agentes supuestamente responsables.

Si se verifica la existencia de conductas constitutivas de delito, los policías podrían enfrentarse a cargos por lesiones, prevaricación y vulneración de derechos fundamentales.

Conclusión: Un hecho que no debe quedar impune

La denuncia presentada por los jóvenes colombianos en València no solo busca justicia para el afectado directo, sino sentar un precedente contra toda forma de violencia institucional y abuso policial.

Los hechos ocurridos el 8 de junio han vuelto a poner en foco la necesidad de revisar los protocolos de actuación policial, implementar medidas de formación en derechos humanos y asegurar que la ciudadanía migrante no quede indefensa ante el poder estatal.

Mientras avanza el proceso judicial, distintos colectivos sociales se mantienen vigilantes, comprometidos con que este caso no se quede en el olvido y se cimiente un futuro más justo y respetuoso con los derechos humanos en nuestra sociedad.