El Ayuntamiento de Algemesí reabrirá el próximo 1 de diciembre la piscina cubierta municipal, una instalación clave para la práctica deportiva en la localidad que quedó devastada por la riada del pasado 29 de octubre. La puesta en marcha llega acompañada de una rebaja general de precios y de un descuento adicional para los usuarios que se vieron afectados por el cierre forzoso tras la DANA.

Reapertura el 1 de diciembre y periodo de inscripciones

Tras varias semanas de trabajos de reparación, limpieza y adecuación de las instalaciones dañadas por el agua y el barro, la piscina cubierta de Algemesí ya tiene fecha de reapertura: el 1 de diciembre. Hasta entonces, y hasta el 28 de noviembre, las personas interesadas pueden acercarse a la propia instalación, en horario de 9 a 20 horas, para informarse sobre los nuevos servicios y formalizar las inscripciones.

Durante este periodo previo, el personal del centro atiende consultas sobre horarios, actividades, tipos de abono y condiciones especiales para antiguos usuarios, con el objetivo de facilitar el regreso progresivo a la rutina deportiva tras semanas de interrupción por los efectos de la DANA.

Rebaja de tarifas y descuentos adicionales

Una de las principales novedades que acompañan la reapertura es la rebaja sustancial de los precios de los abonos. El Ayuntamiento ha decidido ajustar las tarifas para facilitar el acceso al deporte a toda la ciudadanía y ayudar a las familias en un contexto económico complejo.

Además de la reducción general de precios, el consistorio ha aprobado un descuento adicional del 15% para los usuarios que se vieron directamente afectados por el cierre temporal de la piscina. El objetivo es compensar las molestias y reconocer la fidelidad de quienes utilizaban habitualmente la instalación antes de la riada.

Nuevo modelo de gestión con una empresa local

La reapertura de la piscina cubierta viene acompañada de un nuevo modelo de gestión. A partir de ahora, la empresa local Grupo CS Concesiones Administrativas asumirá la dirección del servicio, la organización de actividades y la gestión diaria de la instalación.

Con este cambio, el Ayuntamiento de Algemesí busca mejorar la calidad de la atención al usuario, ampliar la oferta deportiva y garantizar un funcionamiento más eficiente y sostenible. Entre los objetivos marcados se encuentran la puesta en marcha de nuevos cursos de natación, actividades acuáticas para todas las edades, programas específicos para mayores y personas con necesidades especiales, así como la optimización energética de las instalaciones.

Un servicio esencial recuperado tras la riada

La piscina cubierta municipal fue una de las instalaciones más golpeadas por la riada del 29 de octubre, que anegó gran parte de las dependencias y obligó a suspender toda la actividad. La reapertura se interpreta ahora como un símbolo de vuelta a la normalidad y como una pieza clave dentro del conjunto de actuaciones de reconstrucción que se están llevando a cabo en Algemesí.

El concejal de Deportes, Juan Enrique Ribes, ha subrayado la importancia de este paso: «Con esta reapertura recuperamos un espacio deportivo muy necesario para nuestro pueblo. La reducción de precios y el nuevo modelo de gestión son pasos importantes para seguir fomentando la actividad física y la salud de los algemesinenses».

Ribes ha insistido en que el deporte y la actividad acuática cumplen un papel fundamental tanto en la salud física como en el bienestar emocional, especialmente después de meses marcados por los daños de la DANA y por la obligada interrupción de muchas rutinas diarias.

Objetivo: más deporte y más salud para Algemesí

Con la combinación de tarifas más asequibles, descuentos para los antiguos usuarios y una gestión renovada, el Ayuntamiento confía en que la piscina cubierta vuelva a convertirse en un punto de encuentro deportivo y social para personas de todas las edades: desde niños que aprenden a nadar hasta mayores que encuentran en el agua una actividad segura y beneficiosa para sus articulaciones.

La reapertura del 1 de diciembre marcará el inicio de una nueva etapa para la instalación, que aspira a recuperar e incluso superar las cifras de uso previas a la riada, consolidándose como uno de los servicios públicos más valorados de Algemesí.