Ford Almussafes sumará 50 días de paro en julio
Una nueva parada en la planta valenciana agrava la incertidumbre del sector automotriz español
La factoría de Ford Almussafes, uno de los principales motores industriales de la Comunidad Valenciana, continuará acumulando jornadas sin producción durante el mes de julio de 2024. Según ha confirmado el comité de empresa, la planta automovilística alcanzará un total de 50 días de inactividad en la línea de producción de vehículos al cierre del próximo mes, una cifra que refleja la compleja situación por la que atraviesa la multinacional en España.
Este prolongado paro de actividad se suma a los ajustes llevados a cabo desde inicios de año, y responde a la reducción de la demanda de modelos actuales, el adelanto de la nueva estrategia de electrificación de la marca, y a la espera de decisiones definitivas sobre el futuro industrial de la planta.
Julio: un mes marcado por la paralización casi total
La dirección de Ford ha comunicado que la actividad en la planta de Almussafes durante julio será prácticamente nula. En concreto, de los 23 días laborables del mes, 21 estarán marcados por la inactividad en la fabricación de vehículos.
Estas paradas se sumarán a las ya acumuladas durante los meses anteriores, lo que elevará a medio centenar (50) los días sin producción desde enero de 2024. Esta situación ha generado preocupación entre los casi 5.000 trabajadores que actualmente forman parte de la plantilla, así como en el tejido empresarial que depende de la actividad industrial de esta planta.
Calendario de paradas para julio
- Línea de montaje de vehículos: parada prácticamente total durante el mes.
- Área de motores: seguirá operativa, aunque con ajustes.
- Almacén y logística: reducción de actividad pero sin cierre completo.
De este modo, solo se mantendrán parcialmente activas las áreas relacionadas con la fabricación de motores, cuyo futuro sigue vigente hasta enero de 2025, y determinadas tareas logísticas o de mantenimiento.
Caída de la producción: más de un 40% desde 2023
La planta de Ford en Almussafes acumula una caída de producción drástica en lo que va de año. Según datos sindicales, la fabricación de vehículos ha descendido un 46% respecto al mismo periodo en 2023.
El modelo Ford Kuga, único automóvil que actualmente se produce en la factoría, registra cifras de producción cada vez menores debido a la escasa demanda en los mercados europeos donde se comercializa. Este descenso, combinado con la transición hacia modelos eléctricos, ha desmontado las previsiones de continuidad de la actividad a corto plazo.
Para agravar la situación, Ford ha ido eliminando progresivamente otros modelos de su catálogo europeo fabricados anteriormente en Almussafes, como el Ford Mondeo, S-Max o Galaxy, contribuyendo a reducir tanto volúmenes de trabajo como cargas logísticas.
Planes de electrificación sin una hoja de ruta clara
En 2022, Ford anunció que Almussafes sería la “planta elegida” para producir vehículos eléctricos de nueva generación en Europa. Sin embargo, dos años después, los trabajadores siguen sin conocer detalles concretos del proyecto eléctrico que debía garantizar la continuidad industrial tras la salida de los modelos de combustión.
Expectativas frente a la falta de certezas
- La multinacional aún no ha confirmado ni fechas ni modelos eléctricos concretos que se fabricarán en la planta.
- La transición prometida sigue sin avances visibles, lo que genera incertidumbre laboral y sindical.
- Los representantes del comité consideran que la hoja de ruta no está definida y presionan para obtener compromisos sólidos.
Aunque Ford mantiene su compromiso de mantener la actividad en Almussafes en el proceso de electrificación, la falta de inversiones tangibles y ausencia de planes claros hace temer por el futuro a medio y largo plazo de la planta. Este escenario también genera inquietud entre los proveedores industriales de la comarca, muchos de los cuales dependen directamente de Ford.
La lucha sindical ante un escenario inestable
Los sindicatos con representación en la factoría —UGT, CCOO y STM— se han manifestado repetidamente ante lo que califican como una “prolongada y angustiosa espera”. La preocupación no solo gira en torno al número de días de paro, sino a las consecuencias estructurales que esta falta de producción puede tener a largo plazo.
Peticiones clave de los trabajadores
- Más transparencia: Exigen conocer el calendario de inversión para el coche eléctrico.
- Garantías de empleo: Quieren certezas de mantenimiento del empleo en los próximos cinco años.
- Renovación del ERTE: Solicitan prórroga de los mecanismos temporales de regulación mientras no haya producción estable.
UGT, sindicato mayoritario en la planta, ya ha advertido que la pasividad de la dirección podría empujar hacia movilizaciones en otoño si no se produce un giro estratégico en las próximas semanas.
El efecto sobre el empleo y la economía en Valencia
La fábrica de Ford en Almussafes no solo es un pilar del empleo directo en la Comunidad Valenciana, sino que su actividad se extiende a una red de más de 100 empresas auxiliares y miles de puestos de trabajo indirectos.
Impacto del paro en la economía local
- Reducido consumo: El paro técnico afecta al poder adquisitivo de miles de familias.
- Proveedores en riesgo: La caída de producción pone en peligro la cadena de suministro.
- Menos inversión productiva: La industria local retrasa o cancela planes de expansión.
Organismos como la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) o el propio gobierno regional han manifestado su inquietud y piden a Ford una mayor implicación y compromiso con el territorio.
¿Qué puede esperarse en adelante?
La dirección global de Ford contempla una reestructuración significativa en Europa durante los próximos años. El camino hacia la electrificación está condicionado por múltiples factores: desde la normativa ambiental europea, hasta la presión de la competencia y la gestión interna de costes.
Para Almussafes, el reto radica en mantenerse como pieza clave del nuevo rompecabezas industrial. La continuidad de la planta valenciana dependerá de que se confirme la asignación de uno o varios modelos eléctricos con carga suficiente para garantizar una producción sostenible.
Posibles escenarios a corto y medio plazo
- Asignación de nuevo modelo eléctrico: permitiría mantener la planta operativa y abrir nuevas contrataciones.
- Continúa el parón sin inversiones: podría llevar a ajustes profundos de plantilla e incluso al cierre parcial.
- Acuerdos con el gobierno: incentivos públicos podrían desbloquear una inversión futura.
Conclusión: incertidumbre creciente y necesidad de certezas
Los 50 días de paro productivo en Ford Almussafes no solo reflejan una situación coyuntural, sino que son el síntoma de una crisis estructural que afecta a todo el sector automotriz europeo y especialmente a las plantas que aún dependen de modelos de combustión.
La solución pasa por una apuesta decidida por la electrificación, con plazos concretos, inversión real y cooperación con las instituciones públicas. Solo así será posible para Almussafes mantener su papel como referencia de la industria del automóvil en España, asegurar el empleo de miles de personas y consolidar su competitividad en el nuevo mapa internacional del motor.
Mientras tanto, julio será un mes de inactividad casi total, con consecuencias no solo para la factoría, sino para toda una comunidad que vive pendiente del retrovisor de la automoción.